No quiero que me llames,
no quiero acudir a tu lado,
no quiero que me abraces
ni que te arrodilles en la cúspide
de mi vértice dorado.
No quiero tus suspiros
tu aliento, tu embrujo desnortado,
no quiero que mi piel
sienta la ausencia
de tu cuerpo arrebatado.
No quiero que me beses
ni que tiemble la codicia de mis manos
no quiero que reverencies
con el ardor de tu lengua
nuestro desliz ilusionado.
Quiero la pasión, el fuego,
el ansia, la duda, el pecado,
quiero que tu boca sea
el momento de avaricia
de mi vientre obnubilado.
Quiero ser tu vorágine,
tu flaqueza, tu lluvia en el ocaso,
quiero ser tu tormenta
y que tú seas el sol
que aplaque este abismo condenado.
No quiero que me llames,
ni quiero ser bastión conquistado,
no quiero que te acerques
que me abraces, que me beses,
que seas mi juicio hechizado.
No quiero sentirte, pero te siento,
no quiero verte, pero lo hago,
no quiero perder, pero me pierdo
no quiero amarte…
y sin querer, te amo.

Nacida en 1974, en Petrer, licenciada en Filología Inglesa y Máster en Investigación Histórica. Ha publicado las siguientes novelas: El paso de los españoles (2011); El secreto de Loarre, ganadora del I Premio de Novela Castillo de Loarre (2013); Mirada de gato (2015); y Evocadora (2017). Y es co-autora de dos novelas: La Huida Parda (2015) y Después de la huida (2016). Puedes leerla en Facebook.